Conocido por su alto contenido proteico, este insecto, también llamado grillo doméstico (Acheta domesticus), se cría y luego se congela para preservar su frescura y calidad nutricional.
El proceso de congelación no solo mantiene las propiedades nutricionales del grillo acheta, sino que también facilita su manejo y almacenamiento. Esta forma congelada es especialmente popular en la alimentación de animales, como reptiles y aves.
El grillo acheta congelado ofrece una solución práctica para aquellos que buscan aprovechar los beneficios nutricionales de los insectos en su dieta o en la alimentación de sus mascotas. Además, su larga vida útil y conveniencia de almacenamiento hacen que sea una opción eficiente para integrar proteínas sostenibles en diversas aplicaciones alimenticias.